07. 10. 13. El Dínamo – Columna Sara Larraín. Las grandes estrellas de la discusión fueron la eficiencia energética y las energías renovables no convencionales (ERNC) respecto de las cuales los asesores de MEO, Parisi, Bachelet y Claude concordaron en que se debían inyectar más a la matriz eléctrica.
El altísimo rating alcanzado por “Energía Presidencial”, foro en que se enfrentaron los encargados de energía de los comandos de MEO, Claude, Parisi, Matthei y Bachelet, animó a CNN a extender por media hora el debate y clarificó a los ciudadanos la postura de los candidatos sobre los temas en disputa acerca del desarrollo eléctrico de Chile. No obstante el punto flaco, fue la marginación de los cuatro comandos restantes.
Entre los temas más vistosos del debate destacó el rechazo o, más bien, las reservas sobre HidroAysén, lo cual ciertamente pone una lápida sobre la viabilidad política del proyecto al igual que el rechazo a la opción nuclear, con excepción de la recomendación del comando de Matthei de seguir estudiándola y no descartarla en el largo plazo. El tercer gran perdedor del debate fue el carbón, sólo defendido por el comando de Matthei como opción de respaldo y desestimada por los demás a favor del gas natural como alternativa de transición.
Las grandes estrellas de la discusión fueron la eficiencia energética y las energías renovables no convencionales (ERNC) respecto de las cuales los asesores de MEO, Parisi, Bachelet y Claude concordaron en que se debían inyectar más a la matriz eléctrica. Por su parte el asesor de Matthei mostró cierta reticencia a éstas argumentando su intermitencia, pero debió reconocer que recomendarán instrumentos para el desarrollo de la geotermia. El ingenio corrió por el comando de MEO con la expresión de los “cinco ministros renovables” del gobierno de Piñera.
Con respecto al mercado eléctrico se consolidó la crítica a la concentración de la propiedad de las generadoras, la falta de competencia y transparencia, lo cual requiere cambios legales, así como poner fin al sistema marginalista en la tarificación eléctrica.
Finalmente, la novedad para espanto del equipo de Matthei –liderado por uno de los padres de la Ley Eléctrica de 1982 que expulsó al Estado de las decisiones energéticas— fue presentada por los representantes de MEO, Claude, Parisi y Bachelet, quienes apuntaron a mayores atribuciones y mayor rol del Estado en la planificación y desarrollo del sector eléctrico. A ello se agregó el reconocimiento de la necesaria participación ciudadana en las decisiones energéticas y las recomendaciones fueron desde perfeccionar la consulta y avanzar en ordenamiento territorial, hasta la participación ciudadana vinculante.
La contrapregunta de fondo es: ¿energía para qué y para quiénes?, expresada por el comando de Claude ante las peroratas sobre sequía de proyectos de los comandos de Matthei y Bachelet. La pregunta no tuvo respuesta. No obstante, los argumentos esgrimidos por esos comandos develaron que más que reclamos de la señora Juanita hay presión de las mineras.